Definitivamente, necesito gafas. Era sólo cuestión de tiempo y este, pasó. Hasta ahora he ido sobreviviendo alargando el brazo y encogiendo los ojillos pero cuando tienes ante ti una fina aguja que enhebrar se te acaban las excusas. Como ya me conozco bastante bien, sé que terminaré con las gafas que menos me favorezcan del mundo. Decidir sobre nimiedades realmente no es lo mío. Ya voté.
Comentarios
Besos.
Carmen, ahora es presbicia y alejando a determinadas personas de mi vida he llegado a "verlas" claramente pero....pensándolo bien, tal como se dijo, lo esencial es invisible a los ojos. Beso