Vine a borrar pero.....soy

 

 

Creo que ya he empezado el último cuarto de mis vacaciones y aunque me había propuesto no volver al blog hasta acabarlas, no he podido resistirme a la necesidad de expresar lo bien que estoy después de semanas hartamente cansinas. Llevo tres días ya gratamente aislada en el convento. Si no fuera porque la realidad no es otra que esa de que “la carne tira”, no volvería al odiado sur.

Soy de mar, soy de agua, soy de lluvia, de verde y de besos infinitos. Soy de ella, soy de su risa, soy de su paz y sus abrazos. Soy de allí también, y soy de este instante, de la luz que me despierta y el suspiro que me arrulla. Soy de siempre pero sobretodo de ahora; soy quien, a pesar de ir en cabeza sin miedo, protege tus espaldas y te mima para que mañana me sigas amando.

 


 

 

 

 

Comentarios

Carmen Arnaiz Verdera ha dicho que…
Siempre quedan huellas…. Besos!
Melita ha dicho que…
Pero mira, queridísima Carmen, siempre se pueden borrar las huellas. Las que no, seguramente serán cicatrices y a esas hay que mantenerlas en un pedestal por lo mucho que nos han enseñado. Beso desde el norte.
Anónimo ha dicho que…
Me ha gustado lo de la carne tira.
Melita ha dicho que…
O la cabra tira al monte.
Si ha dicho que…
En mi próxima vida quiero ser como tú.
Mil besos
Melita ha dicho que…
Yo espero no tener próxima vida por muy buena que fuese. Besos mil.