Al final sí que puede que esté cansada. Quizás harta. Ojalá pudiese desaparecer pero ni siquiera puedo permitírmelo. No quiero buscar más ni me que busquen, no quiero hablar ni que me hablen, no quiero mentir ni que me mientan, no quiero amar ni que me amen, no quiero necesitar ni que me necesiten. Creo que en el fondo siempre he sido un “no querer” y por eso estoy permanentemente en ese mismo lugar perdida deseando lanzarme al vacío.
Comentarios