Pereza emocional

 

 

Hace tiempo que no consigo limpiar y ordenar mi interior para ubicar nuevos sentimientos  porque siempre dejo en algún rincón alguna caja con recuerdos que en el fondo no sirven para nada y sé que no volveré a utilizar. Creo que si no los he tirado ha sido más por pereza. Acabas cada historia tan  agotada que te faltan las fuerzas para sacarlo todo del tirón y siempre te dices que ya lo acabarás otro día. Y los días pasan y las cajas siguen ahí, estorbando, ocupando casi siempre ese rincón imprescindible para darle cabida a otra mudanza sentimental.  Y no encaja. Intentas girarla, plegarla, pulirle algún lado y al final renuncias a ella.  Mi inoperancia afectiva  creo que está basada en el principio de exclusión de Pauli o más sencillamente, en la impenetrabilidad de la materia. Quizás ya sea hora de que me ponga el mono de trabajo, incluyendo esa faja lumbar para evitar lesiones mayores, unos buenos guantes porque a alguna de las cajas le sobresalen espinas aún y gafas oscuras por si se le escapa un rayito de luz en el traslado hasta el basurero. Después un par de capas de pintura bonita y, a disfrutar del espacio.

 


 

 

 

Comentarios

Mi nombre es Mucha ha dicho que…
disfruta dia a dia no te lo propongas
la vida son pequeños momentos buenos o malos
abrazo
Melita ha dicho que…
Voy a empezar a quedarme y buscar los buenos solamente. Un saludo, Mucha.
Si ha dicho que…
Me ha encantado esta metáfora porque me he sentido muchas veces igual de atascada.
Mil besos
Melita ha dicho que…
Como bien sabes, las metáforas y los refranes siempre me han guiado bien. Besos mil querida Silvia.
Carmen Arnaiz Verdera ha dicho que…
En los recuerdos podemos utilizar las tres eres. Reutilizar, reciclar y reducir, de acuerdo al momento que estemos viviendo, al igual que en el amor, todo va ligado. Besos, preciosa.
Melita ha dicho que…
Bueno Carmen, cuando una se pone a redecorar es necesario tirar algunas cosas. Beso.