De esos días bonitos

 

 

Ayer una compañera de trabajo cuando ya me iba me regaló mi piedra astral. Estaba envuelta en un paquetito de regalo que metí en el bolsillo de mi chaqueta y que aún sigue ahí sin abrir. Eso sí, esta mañana le he vuelto a dar las gracias, mintiéndole sobre lo bonita que es. Y como he dicho,  sigue sin abrir. Este verano antes de vacaciones me regaló una libreta para escribiera durante mi estancia en el convento. Hace un par de años me sorprendió al regalarme un champú para canas que nunca se me hubiera ocurrido usar. Es una de las personas que menos conozco, con la que menos relación tengo y sin embargo ha terminado sorprendiéndome con su actitud pues cada dos por tres tenemos “broncas” laborales. En el trabajo me llaman House. Por algo será. Quizás esta mujer perciba mi falta de maldad y entienda mi ácido sentido de humor. Creo que un día de estos la invitaré a comer e intentaré averiguar esa debilidad por mí. A veces  la distancia que nos separa de algunas personas no llega ni a un centímetro.

Este mes me lo he tomado sentimental y emocionalmente sabático a la espera de la última semana que será de vacaciones y que dedicaré a placeres más terrenales. Hoy es un día bonito dentro de una semana bonita en la que me atrinchero en busca de esa reconciliación que ansío. Cenaré hoy antes, abriré esa botella de vino que pertenecía a otro momento e imaginaré el color y la forma de mi piedra astral.

 


 

 

Comentarios

Carmen Arnaiz Verdera ha dicho que…
Y brindo contigo desde esta distancia, esta distancia tan suya, tan especial, que en lugar de dejar espacios vacíos, llena corazones bien avenidos, como pudiera ser el tuyo y el mío, el de esa compañera, la piedra astral y una luna que no tiene frío. Me gusta sentirte bien, porque transmites divino. Besos!
Melita ha dicho que…
Entre tú y yo no hay distancia, nunca la hubo. Tenemos una conversación pendiente. Sin prisa. Beso
Si ha dicho que…
Pues si que tienes más vacaciones que un maestro,disfruta de un fin de semana bonito también Carmelita y ojo con tu compañera que ya te ha tirado la piedra.
Mil besos
Melita ha dicho que…
Es lo que tiene no haber estudiado. Soy esquivadora de piedras profesional.

Besos mil