Quererse de verdad ( lo que de verdad quisieron enseñarnos en la escuela)




Mi abuela no hablaba, refraneaba : “Dos para quererse, deben parecerse”. Creo que, para que una relación sea exitosa, esta es una premisa básica pues si hablamos de amor de dos, deben de existir importantes intereses comunes para no perder el tiempo en refriegas infructuosas y por supuesto aunque deambulen en direcciones diferentes, el sentido tiene que ser el mismo ( esto es un concepto que tomo prestado de mi física de E.G.B: dirección y sentido de un vector). Como ejemplo claro, una pareja de bueyes. Asociación eficiente.
Y no sólo utilizaré la física. Una materia interesante para explicar el “quererse de verdad”  es la música.




Pues bien, para quererse de verdad se tiene que haber superado la fase de enamoramiento por lo que no se pueden dar ninguna de las frases de esta canción. Los síntomas de este “amor” además de no serlo, son peligrosos.
Para no gastar energías, unas nociones de matemáticas también son importantes. El querer se puede medir, no es importante hacerlo pero tenemos que ser sensatos y no dividir el caudal. Por ejemplo, si tengo 100 quereñones ( unidad de intensidad del querer) y lo divido entre dos o más almas, la capacidad de eficacia de este querer pierde potencial por lo que es absurdo malgastar este recurso. Mejor poner un solo objetivo que recepcione el 100% de nuestro querer.
La lengua es fundamental; expresar con fortuna lo que nos inspira la persona que queremos es quizá la asignatura pendiente de cada septiembre. No ahorremos palabras, la lengua castellana es muy rica para recordarle que ahí estamos, a su lado.
Intentaremos quitar trabajo y aminorar las cargas a nuestro ser querido adelantándonos a actos que le supusieran un esfuerzo excesivo procurando aplicar todo el vigor construido a raíz de la educación física.La de veces que nuestra pareja nos ha cabreado con preguntas absurdas y cansinas  del tipo si has hecho esto o lo otro, lo de más allá, etc…. Si te hartas, le sueltas un “yes” y le despistas con el giro de idioma.Nunca debemos olvidarnos de escrutar su cuerpo como si fuera la primera vez que lo tenemos entres nuestras manos. La anatomía humana siempre fue la parte que más me ponía de las ciencias naturales.
Quererse de verdad no es sólo recordar el rincón de la geografía donde le díste el primer beso, es volver allí con los ojos cerrados en esos momentos de duda y dificultad para volver a emocionarte.La fidelidad (en latín, fidetitas, servir a un dios) es dónde se refleja totalmente el quererse de verdad . Como dice la religión católica en su noveno mandamiento “No consentirás pensamientos ni deseos impuros”  y esta idea tiene que ver mucho con la asignatura de matemáticas antes esbozada. Si no eres capaz de mantener el compromiso, tácito o no, de lo que significa pareja, inútil camino tienes por recorrer. 

Quererse de verdad es mirar y descubrir  la cantidad de defectos que tiene y sonreír con la certeza de saber que, esa persona que tenemos enfrente,  es lo mejor que nos ha pasado en la vida.

Comentarios

Carmen Arnaiz Verdera ha dicho que…
En cierta medida puedo coincidir contigo en el último párrafo, más concretamente cuando escribes “esa persona que tienes enfrente, es lo mejor que nos ha pasado en la vida”. Bueno, lo mejor que nos ha podido pasar en la vida es aprender a querernos primero a nosotros mismos, sin esta premisa, será muy difícil que se cumpla lo expuesto por ti, me refiero a la frase en cuestión, porque todo el texto en si me ha encantado.
La costumbre hace mucho en la pareja, más que el amor (como dice la canción), una costumbre donde el amor está sentado a su lado mirándola. Referente a los intereses comunes difiero un tanto, a no ser que te refieras al interés común en el que la pareja remen en la misma dirección. De todas formas es harto difícil mantener el barco de la pareja a flote, hoy en día casi todos se hunden, están muy mal construidos, hay demasiado oleaje alrededor. ..
Besos
Nieves ha dicho que…
En el refrán de la abuela tambien cabe el tres, cuatro, cinco...el amor, como decia Clemente, aquel seleccionador de fútbol, es cosa de camareras.
Vamos mejorando.
Saludos
N
Melita ha dicho que…
Carmen, los barcos son de papel ahora. Nos conformamos con cualquier material con tal de que sea rápido de construir. Flota el rato que dura cruzar el charco del momento.Un abrazo, amiga escondida.

Nieves, gracias por asomarte. A mí sólo me cabe una, respecto al tema en concreto tratado. Beso.