Marchó ya el perezoso otoño
olvidando las hojas del árbol
en sus ramas colgadas,
el pájaro acunado en la mañana
el sol aburrido en mi ventana.
Han bastado cuatro gotas de lluvia
tres ráfagas de viento y dos heladas,
para que una nueva estación
cargara con sus labores asignadas.
Comentarios
nueve, son los versos que lo forman
para qué más letras? me dije
si así lucen como faro en la niebla.
Besos. Carmen