Soberbia

Es fácil escribir sobre los pecados que se practican.
En los últimos tiempos me ha dado por presumir de la gente con la que ya no me hablo. Tratar de explicar el porqué de mi nula relación con los compañeros de trabajo hasta el punto de decir que no cruzo palabra ya con el 60% (joder), sería imposible sin reconocer por mi parte una falta de humildad que provoca rechazo a la mediocridad y la ausencia de sentido de humor de estos.
Si yo fuese una persona sensata como comunmente se entiende este término, no me quedaría otra que buscar ayuda profesional tal y como aconseja mi pareja.¿Pa qué? Encontrar  motivos para despreciar las actitudes de los demás, la verdad es que tiene mérito y más cuando no se tiene mucho tiempo.
Vanagloriarme del rechazo que provoco no hace más que realimentar mi ego y marca, muy contrariamente a lo que deseo,una línea de ruptura con las personas que quiero.
La soberbia te exime de responsabilidad en cualquier relación emocional; presupones que tus cartas están boca arriba y pones el grito en el cielo cada vez que alguien quiere descubrir una de ellas. No sé porqué tengo tantos y tan grandes pecados cuando el que debería de considerarse el mayor de los capitales es el amor pues el amor es una trampa de la que sólo puedes escapar en pareja o con los pies por delante.

¿Necesito realmente a los demás? Todo tiene un precio; la soberbia es muy barata.

Concluyendo, se acerca el 2013 con números de mal agüero y con la incertidumbre de saber el momento exacto en el que Damócles se interpondrá en nuestro camino.

Feliz Navidad. En contra de lo que pueda parecer, estas fechas enternecen mi corazoncito.



Enhiesto surtidor de sombra y sueño



que acongojas el cielo con tu lanza.



Chorro que a las estrellas casi alcanza



devanado a sí mismo en loco empeño.



Mástil de soledad, prodigio isleño,



flecha de fe, saeta de esperanza.



Hoy llegó a ti, riberas del Arlanza,



peregrina al azar, mi alma sin dueño.



Cuando te vi señero, dulce, firme,



qué ansiedades sentí de diluirme



y ascender como tú, vuelto en cristales,



como tú, negra torre de arduos filos,



ejemplo de delirios verticales,



mudo ciprés en el fervor de Silos.

Gerardo Diego

Comentarios

nieves ha dicho que…
Ardo en deseos de leerte en los pecados capitales que te faltan.
Felicidades.
Nieves
Anónimo ha dicho que…
Aaaaayyy Señor que cruz!!!
Feliz Navidad cariñoooo