El árbol de la vida


Cuándo ví la publicidad de su estreno pensé que sería un remake de la protagonizada por Montgomery Clift y Elizabeth Taylor. Afortunadamente no es así aunque la coincidencia del titulo no es casual ya que la leyenda dice que el árbol de la vida abre todas las cerraduras y cierra todas las heridas.


Tengo que reconocer que la película que ví anoche es muy compleja a la vez que hermosa. A los quince minutos del comienzo, la mitad de los espectadores abandonaron la sala con paso un tanto indignado, como huyendo.

¿Qué esperamos encontrar en el cine cuando compramos una entrada? Si te la bajas de internet y por maldad te sale la típica porno, la borras y punto; si te la bajas y se oye horrorosa...la borras y punto; si te resulta insoportable, la borras y punto. Cuando has pagado, has elegido un tiempo importante de tu ocio para desplazarte a una sala y llevas un cubo de palomitas...¿por qué no darle una oportunidad?

La primera media hora es cierto que te deja grogui porque no sabes si estás en un documental de la 2 o en los ejercicios espirituales de tu colegio y símplemente por la excepcional banda sonora, por la fotografía y por los sentimientos que remueve la voz en off te concentras en ella y abstraes tu alma inquieta. Durante buena parte de la película, las lágrimas se asomaban a mis ojos porque muchas, muchas veces a lo largo de los años me he preguntado sobre el origen y el sentido de la vida, sobre el deseo y las fuerzas para vivir, sobre la pérdida de un ser querido al que no supe proteger y ayudar. Me veía reflejada en esa rebeldía ante lo desconocido, ante Dios, su creación, la fe, la fragilidad de verte tan vulnerable cuando se supone que alguien vela por tí y te quiere; alguien o algo que te da la vida te la arranca sin saber el porqué. ¿Qué sentido tiene la vida?

Yo sé que la he interpretado a mi manera, como si en la pantalla hubiesen lanzado un bote de pintura y describo lo que me pareció. La familia aquí es pura metáfora de la vida, como ese creador (padre) duro y bueno a la vez, que no entendemos. Un padre que castiga, que miente a nuestro ojos, que está lejos y a la vez notas sus abrazos repletos de amor convulsionándote para no pasar desapercibido.

A mí me gustó, me hizo pensar y sobretodo recordar muchas cosas vividas, muchas preguntas que me hice alguna vez y que siguen sin respuesta.


Impresiona ver dinosaurios en esta película, pero claro, los que abandonaron la sala se lo perdieron

Comentarios

Anónimo ha dicho que…
La verdad es que la película al principio desconcierta un poco. Cuando decides ir a verla no te esperas lo que ves, pero si no te sales de la sala, como algunas personas hicieron, termina por ser una buena película, sobre todo la música y la fotografía, aunque creo que sobrevalorada por la critica.
Una película para gente muy sensible.
Im
E ha dicho que…
Creo que es compleja y difícil, requiere concentración y abstracción a raudales; y sí, sobrevalorada, tal vez... pero es bella
un saludo