El largo y cálido verano


Llevo más de una semana intentando subir un vídeo. Mierda de conexión: lenta, lenta, lenta…Así que llevo más de una semana deletreando las palabras que quiero escribir con la certeza de que la tecnología ha logrado “apagar” mi elocuencia ya que eran cosas muy oportunas a las que me quería referir.
Hoy me he armado de paciencia e intento echarle un pulso al cacharro este; se suba o no el vídeo, hoy habrá post. Y para consolidar la paciencia he añadido a mi alma un par de cervezas, una manzanilla ( de Sanlúcar ) y un gintonic estupendo con la ginebra que me regaló mi hermano para mi cumple, la G’Vine que es un verdadero deleite para el paladar.
Aún me quedan siete sesiones de rehabilitación aunque presiento que después de las vacaciones tendré que retomarlas; me he propuesto recuperarme del todo antes de que acabe el año; echo de menos el padel y el tenis, fuentes de mis males, y por ahora me consuelo con la natación y el spa. Dormir seis horas al día me sienta bien aunque esté fundida y es que dormir es la manera más absurda de perder el tiempo pues a estos días poco tiempo libre le puedo quitar, no más de cuatro horas para realizar mis caprichitos. La boda a dos días vista ya no hay quien se la quite de encima y yo sin saber qué ponerme: me ponga lo que me ponga mi madre me pondrá verde y es que ella está ilusionadísima con la boda de su ahijada y…¡se ha diseñado su propio vestido! Será una sorpresa para todo el mundo pues lo lleva con un ocultismo casi enfermizo. Por lo que me ha contado(soy una privilegiada) va a ir como de cabaretera de los años 20, flecos incluídos. Está tan ilusionada que parece una adolescente y yo que no tengo ganas de ná, sólo de vacaciones que aún se vislumbran lejanas. Lisboa bien vale la espera.
Como creo que al final no podré subir el vídeo lo explicaré.
En Granada este año hemos tenido casi playa pues como llovió y nevó tanto en invierno el río Genil baja a tope de agua clara ya que estamos a más de mitad de Julio y se aprecian aún en Sierra Nevada manchas gigantes de nieve. Cuando miro hacia ella me recuerda a una vaca. Total, que como el deshielo este año parece eterno a la gente acalorada le ha dado por plantar sus toallas a orillas del Genil y darse gélidos baños de agua pura y cuando llegó la noche más famosa del año, 11 de Junio, mientras Casillas levantaba el trofeo de campeones del mundo, desde el puente más céntrico de Granada la gente se lanzaba al agua como alternativa al cierre y custodia de la fuente de las hasta ahora celebraciones: la Fuente de las Batallas.
Decir que a estos aprendices de peces los sacaron (secaron a palos) los antidisturbios un par de horas después.
Propongo cambiar la fiesta del 6 o el 8 de Diciembre por la del 11 de Junio como día de “España”. Fiesta Nacional.
Oé, oé oé oééééé´.


(Ná, que no sube ) Otra vez será.

Comentarios

nieves ha dicho que…
Melisssss a mi no me parece que dormir sea una forma de perder el tiempo....qué ricas las siestas en verano cuando el librito fundido se te cae de las manos........mientras si , mientras no, disfruta de las bebidas, del rio genil, de la nieve con forma de vaca, de la boda, de lo que te dé la gana....y Pessoa bien vale un poco de paciencia.
besos
Melita ha dicho que…
Uff, las siestas siempre me han parecido odiosas. Recuerdo estas en el cortijo de mis abuelos que para descansar ellos de mí y mis travesuras me obligaban las tardes de verano a recluirme en un dormitorio durante más de una eterna hora.