Las cínicas campañas de la DGT

Es que te ponen de mala hostia.

Con la anterior yo pensaban que habían tocado techo pero ya la última ha sido la rehostia. Sí, llamaré a mi familia, a mis amigos, a mi pareja, a mis compañeros de trabajo, a los vecinos....para despedirme cada vez que coja el coche o cada vez que salga a la calle por si me parte un rayo, o cuando vaya a lcine por si me ahogo con las palomitas, o cuando coja el autobús por si va un kamikaze o cuando vea un partido del Barça por si me da un infarto.

La vida es ese estado que tenemos justo antes de morirnos.

¡ Dios mío ! ¡ Sálvame de tanta mediocridad !

Comentarios