Otro mes

Extraña cada año que Febrero sea tan corto.
He tenido la ocasión de acabarlo conociendo una parte de España que desconocía, La Mancha y la verdad es que ha sido una experiencia inolvidable: atravesar por buenas carreteras vacías tierras límpias con verdes trigos incipientes algunas y podados viñedos otras. Todo llanuras que llamaban la atención por la quietud que transmiten al viajero que no acabada de creer que no existiese algún elemento inesperado que alterara el paisaje. Recorrí Ciudad Real de sur a norte, de este a oeste y me instale prácticamente en el centro: Almagro.

Esta ciudad es un lujo a la vista y al paladar. Había oído referencias a ella por cuestiones teatrales, por su corral de comedias que es toda una joyita pero me sorprendió ver el montón de casas señoriales que posee. Referente de la Orden de Calatrava, supuse que la ciudad tenía esa configuración por herencia de ella. Error; la mayoría de palacios y casas señoriales fueron levantados por familias alemanas ( como los Fugger, Xedler ó Wesles ) que llegaron allí como beneficiarios y administradores de las minas de Almadén.
Aconsejo su visita al igual que a las Lagunas de Ruidera ( a unos 80 kms ) que son toda una sorpresa.

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