Toda

Aquí me tienes,
como sámara impaciente
anhelando ese aliento
que desconozco
y que describiría exactamente
con sólo sentir la luz de tus ojos.

No necesito de tus palabras,
todas imaginables.....
el camino de tu jardín
es ya vereda sin retorno.

Elijo perderme en él
para arrojarme a tu regazo
y allí dormir solemnemente
bajo la custodia de tus abrazos.

Que ya no soy yo,
sino parte de tí buscándote;
que muere por encontrarte
y compartir, la paz dentro de la paz.

Comentarios

Anónimo ha dicho que…
AQUI ESTOY
COMO OSADA PEREGRINA
QUE DESCANSA BAJO LOS ALAMOS
PARA BIEN PROTEGERME DEL SOL.

SI ACASO TU TE ACERCARAS
Y A BIEN CALMARAS MI SED
PODRIAMOS ESPERAR A LA NOCHE
LA LUNA VENDRIA DESPUES.
Melita ha dicho que…
Gracias anónimo